¿Qué es la pérdida de equilibrio?
La pérdida de equilibrio es la sensación de fuerte inestabilidad, mareo o aturdimiento, que le hacen sentir que va a caerse o que su entorno se mueve sin control.
A menudo, la pérdida de equilibrio se confunde con mareos y vértigo, y es que en muchos casos se dan a la vez como sintomatología de una patología.
Los principales síntomas de la pérdida de equilibrio son la falta de estabilidad, vértigo o sensación de movimiento o vueltas y los mareos. Los síntomas pueden aparecer al estar de pie, sentado o durmiendo, aunque la inestabilidad será mayor estando de pie.
Causas pérdida de equilibrio
Los problemas de equilibrio pueden venir dados por distintas patologías, siendo las más frecuentes:
- Problemas del sistema vestibular. Las alteraciones en el oído interno pueden causar la sensación de que la cabeza flota o pesa, y provocar inestabilidad en la oscuridad.
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- Vértigo posicional o Vértigo Posicional Paroxístico Benigno
- Presbivértigo o trastornos del equilibrio en personas mayores
- Lesiones vestibulares unilaterales y bilaterales (déficit vestibular periférico)
- Enfermedad de Ménière
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- Enfermedades neurológicas como Ictus o Enfermedad de Parkinson que provocan alteraciones del equilibrio.
- Lesión en los nervios de las piernas (neuropatía periférica). Las lesiones pueden generar dificultades para caminar.
- Problemas articulares, musculares o visuales. La debilidad muscular y las articulaciones inestables pueden contribuir a la pérdida del equilibrio. Los problemas de la vista también pueden causar inestabilidad.
- Medicamentos. La pérdida del equilibrio o inestabilidad puede ser un efecto secundario de ciertos medicamentos.
Rehabilitación del equilibrio
La rehabilitación vestibular y equilibrio consiste en la valoración y el tratamiento de pacientes con mareo, inestabilidad y problemas de equilibrio. Este tipo de rehabilitación está indicada en pacientes con trastornos del equilibrio de origen vestibular, así como patologías de origen no vestibular que presentan problemas para mantener el equilibrio.
El tratamiento de la inestabilidad favorece la activación de los mecanismos que ayudan a compensar y corregir la información incorrecta producida por una alteración en el sistema del equilibrio (oído, cerebro, etc.), estimulando la adaptación a la nueva situación y reaprendiendo nuevas estrategias de equilibrio que permitan disminuir o eliminar los síntomas.
Con la aplicación de técnicas y dispositivos de rehabilitación específicos, se realizará un programa de ejercicios que tendrá una dosificación establecida según el estado del paciente. El fisioterapeuta deberá supervisar, controlar y adaptar progresivamente el tratamiento a la necesidades y evolución de cada persona. Se combinan ejercicios de equilibrio de pie y caminando, estimulación optocinética y entrenamiento con posturografía. Incluimos la utilización de la realidad virtual para potenciar la recuperación de nuestros pacientes.
Los protocolos de rehabilitación se realizan a lo largo de semanas consiguiendo finalmente reincorporar al paciente a sus actividades habituales lo antes posible.